Guatemala - Una experiencia absolutamente inolvidable

Andre Mershad, Embajador de JustWorld desde 2012, de New Albany, Ohio, fue en el viaje más reciente de JustWorld a Guatemala para visitar Los Patojos. Su experiencia allí le conmovió tanto que quiso compartir la inolvidable transformación que experimentó."Mi viaje a Guatemala fue una experiencia absolutamente inolvidable. Nunca hubiera pensado que a tan solo 2 horas y media de avión hay un país tan lleno de luchas, pero también donde existe tanto amor y felicidad al mismo tiempo. Creo sinceramente que ese amor y esa felicidad de los que fui testigo proceden directamente del Proyecto Los Patojos.El primer día de nuestra misión, a una de las personas que llevaba mucho tiempo en el viaje y embajadora de JustWorld, Sophie Simpson, se le ocurrió una idea brillante. Sugirió que hiciéramos un recorrido por el antiguo proyecto, lo que nos permitiría escuchar y captar que historia, y caminar hasta el proyecto actual, donde un nuevo historia surgiría. Esta propuesta resultó ser el punto culminante y la mayor experiencia de mi viaje a Guatemala. Pasar de escuchar el vacío de la casa de Juan Pablo, donde ya no estaban los estudiantes, a oír las risas y los gritos de los estudiantes en un proyecto nuevo y mejorado fue, y será para siempre, indescriptible. Los sonidos y las imágenes me dieron esperanza, pero también me hicieron sentir incomprendido en varios sentidos. "¿Cómo es posible que algunas personas aprovechen tanto las cosas especiales que adquieren, cuando otras carecen de estos elementos, debido a la zona en la que viven?". me preguntaba. Aunque me parecía incorrecto. Los objetos materiales no son especiales, y no hacen a ninguna persona mejor o más adelantada que cualquier otro ser. Es la motivación, la pasión y la determinación que obtenemos las personas lo que nos hace especiales. Esta es la cualidad más extraordinaria que pude observar en los jóvenes de Los Patojos. No se pagaron honorarios, ni fueron necesarios, para que Franc fuera un malabarista fascinante, o para que el equipo de baile de Los Patojos fueran increíbles bailarines de breakdance. Este talento salió de dentro y se ha irradiado hacia fuera, y Juan Pablo ha permitido que estos artistas crecieran y se convirtieran en los suyos propios dándoles el espacio físico, y el tiempo, al tiempo que abogaba por estas personas tenaces. Cuando sientes una pasión, es importante hacer cualquier cosa y todo lo que esté en tu mano para sacar lo mejor de ella, y esto es lo que Los Patojos está enseñando y creando.Estoy seguro de que las sensaciones recibidas por estar en esa escuela son suficientes para impactar a cualquier persona del mundo, y ya se ha manifestado en los alrededores de Los Patojos. Los ciudadanos vecinos del proyecto están empezando a pintar sus casas, antes sin pintar, con el vibrante rojo de Los Patojos, los niños pueden ir andando a la escuela sin miedo a la violencia y, poco a poco, la basura que antes inundaba la zona de Los Patojos se está recogiendo y allí se queda. Una vez que se vea una diferencia positiva, la sociedad reaccionará. La gente no querrá volver a contaminar una zona que es mucho más pura, y por eso la moral de Los Patojos es extremadamente eficaz. Nunca había visto las diferencias que yo, como individuo, y nosotros, como Embajadores de JustWorld, somos capaces de hacer, y se siente increíble formar parte de esta transformación."